Esperamos que todos hayáis tenido unas bonitas y reconfortantes vacaciones.
La mayoría de nosotros hemos disfrutado del mar o la montaña exponiendo la piel de la cara y posiblemente el cuerpo al sol, el agua del mar o al cloro de las piscinas. Como consecuencia de ello, es muy probable que notemos la piel reseca y deshidratada.
¿Qué podemos hacer para recuperar la piel?
El primer paso consiste en exfoliar e hidratar.
En la zona del rostro, una exfoliación con un peeling suave y una buena hidratación posterior sería una opción fácil y segura siempre que no sigamos exponiéndonos a los rayos solares. Una opción más avanzada, sería la utilización de un láser como el Elektra by Clear Lyft o Fraxel Dual acompañado de alguna sesión de Skinbooster.
Con ello conseguiremos eliminar la capa de células muertas consiguiendo muchísima mejor nutrición e hidratación posterior.
Una vez tenemos la hidratación conseguida, podemos valorar la piel y poner en marcha una rutina de cosmética médica que permita rejuvenecer, tratar manchas y arrugas y conseguir una piel más tersa y luminosa. La valoración de otros tratamientos dirigidos a la flaccidez o pérdida de volumen será muchísimo más eficaz tras haber realizado la exfoliación y nutrición
En la zona del cuerpo el sistema sería parecido.
Aconsejamos un peeling corporal que permita la perfecta penetración de agentes hidratantes. El peeling corporal se realiza con un scrub mecánico y la hidratación se acompaña de un masaje relajante a la vez que nutritivo.
Una vez terminado el tratamiento inicial, se puede evaluar la necesidad de algún tratamiento dirigido a la flaccidez o a eliminar grasa localizada en caso que hayamos ganado peso durante el periodo estival.
En definitiva, es el momento ideal para poner la piel del rostro y el cuerpo a punto y trazar un plannig que nos permita mantener la salud de nuestra piel.
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