La edad está en la actitud, o eso dicen… pero a pesar de tener una buena actitud y un buen pensamiento positivo, la década de los 50 comporta grandes cambios corporales.

¿Cómo podemos minimizar estos cambios y hacer que nuestro cuerpo se acerque más a nuestro espíritu juvenil?
Estos son varios consejos que nos ayudarán a madurar externamente con una apariencia más juvenil

– Llevar una alimentación equilibrada y moderada.
– Dormir y descansar de 7-8 horas nocturnas.
– Practicar ejercicio de forma habitual.
– Suplementar la alimentación con elementos como Calcio y antioxidantes.
– Hidratar la piel con una buena cosmética y con técnicas médicas como sería la mesoterapia.
– Minimizar la pérdida de grasa facial y la disminución de la densidad ósea con el uso de rellenos de ácido hialurónico.
– Combatir la flaccidez con técnicas de radiofrecuencia o inyección de estimuladores de colágeno como el Sculptra o la Hidroxiapatita cálcica.
-Valorar con ginecología la necesidad de realizar láser vaginal para disminuir la atrofia y prevenir la incontinencia de orina.
– Salir con los amigos, reírse con ganas, disfrutar de la familia y trabajar con ilusión.

El cóctel de estos consejos, cuantos más mejor dentro de la mezcla, hará que los 50 te transporten a los 30 con la visión tranquila y serena de la madurez y la frescura e ímpetu de la juventud.