Los testículos son órganos reproductores masculinos. Producen hormonas masculinas como la testosterona y espermatozoides.
Los testículos se encuentran alojados en las bolsas escrotales que son unas ‘fundas’ que protegen el interior. Entre la parte externa del testículo y la interna del escroto existe un líquido que permite que el testículo sea móvil.
El hidrocele es la acumulación de líquido entre estas capas dando lugar a un aumento de tamaño. El tamaño es variable y normalmente no son dolorosos y no comportan gravedad aunque pueden ser incómodos.
Suele afectar al 1% de los varones adultos.
Para su diagnóstico y descartar otras causas o patologías se realiza una ecografía que es una técnica indolora y sin radiación.
El tratamiento es quirúrgico y se realiza si las molestias son importantes. Es una cirugía ambulatoria y los resultados muy satisfactorios.
Ante cualquier duda, la Dra. Esther Gómez, especialista en Urología puede valorar el caso y decidir la actitud terapéutica más adecuada.
Porque la salud genital y reproductora masculina es importante, ¡no dejes de consultar!
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